Dos ciudades, una misma mirada: el problema de la desigualdad.

Resumen

Una de las experiencias más enriquecedoras que la Universidad puede ofrecer es la oportunidad de viajar. En este entorno, se nos enseñan muchas cosas, y se instruye para adquirir habilidades que nos ayudarán en la vida laboral. Pero viajar va más allá: nos permite cambiar la perspectiva de vida, haciéndonos conscientes de los aspectos positivos y negativos de nuestro lugar de origen. En múltiples ocasiones, tanto con amigos como con alumnos, hemos reflexionado sobre cómo las personas en todo el mundo comparten ritos como beber alcohol y disfrutar diferentes tipos de comida, como una forma de celebrar con seres queridos, unos con cerveza, otros con vino y algunos más con vodka o sake, aunque el fin es el mismo. Viajar ayuda a comprender que, a pesar de nuestras diferencias, compartimos muchas similitudes. Hoy en día, la globalización también nos ha enseñado que el mundo se ha vuelto más accesible, ya sea físicamente o a través del mundo digital.